INFORMACIÓN DEL TALLER
Dirigido a todo el mundo.
¿Qué vamos a hacer?
Es un enfoque dinámico que crea una transición entre dos asanas distintas y coordina los movimientos de nuestro cuerpo con respiración y mudras.
Es un trabajo físico potente, siempre aeróbico, que nos lleva a conseguir fuerza, una buena flexibilidad y una gran capacidad de concentración. El fluir de estas prácticas es despacio, que es más difícil que rápido, porque supone controlar los movimientos y «luchar» contra la gravedad. Por eso es muy importante la repetición de una misma secuencia, que permite al cuerpo (no a la mente) memorizar y modular el esfuerzo. Y aquí está la base del Yoga: repetición y constancia.
Puede ser algo complejo seguir al pie de la letra el patrón de respiración, ya que la mente tiende a moverse muy rápido y desestabilizarse en cuestión de un segundo.
Sin embargo, mediante la repetición y la constancia, después de un cierto período de tiempo, tanto la mente como el cuerpo pueden ser totalmente controlados.